jueves, 28 de enero de 2016

Shiva Station



Hermosillo #112, Col. Mitras Centro, Monterrey

facebook.com/shivastation

Precios: baratos (75 pesos comida completa)

Por Santoku

Relajados, a gusto y muy bien servidos, así salimos del Shiva Station.

Este restaurancito en Mitras te absorbe en su ambiente místico, de temática hindú y música meditativa; de hecho, intentamos tener prisa y fue imposible, aquí tu mente se apaga y se concentra en disfrutar tus alimentos y nada más.







La carta del menú por un lado ofrece comida de la India, totalmente libre de carne, y por el otro opciones tradicionales veganas (hamburguesas, pizzas, tacos, etc.)

Para no fallar pedimos la comida del día (75 pesos), muy completa, que incluye ensalada, sopa, bebida, plato fuerte y postre.

Trajeron primero una ensaladita simple de lechuga, zanahoria, betabel y pepinos, bañada con aderezo de ajonjolí muy sabroso. También un plato de sopa de lentejas con verduras, que nos satisficieron. De beber, limonada.



El plato fuerte consistía en arroz, humus, pakoras (gajos de papa capeados), ensalada de pepino y tomate, y pan de centeno para acompañar. Aunque sencillo, te baja muy bien el hambre. Bañamos todo con el chutney (salsa) agripicante que ponen al centro.



El postre fue simple: una galletita de avena.

Confieso que en mi probable ignorancia acudí al restaurante indio con la idea de que encontraría platillos a base de curry, “populares” de esta cocina. No los vi anunciados en el menú, quizá estén con otro nombre o incluyan el sazón en otros platos de la carta. No digo que tengan que servirlo, porque su propuesta es agradable, pero no estaría mal.





Ya estamos planeando la próxima visita para probar el otro lado del menú (la pizza no se ve nada mal... apuntado). Únanse y dense la vuelta, o pidan para llevar (8112341483), o pregunten por los cursos de cocina vegana que también imparten.

 Por ahora, Namaste, Shiva Station, sí nos dejaste... al filo de la mesa.

¡Hasta el próximo corte!....

1 comentario:

  1. He querido ir desde que estaban sobre Simón Bolívar, hace poco, quizá la semana pasada pasé algunas veces por ahí y me llamó la atención, ahora ve que solo cambiaron de ubicación. Suena muy extrenso el menú y bien sazonado todo. La ausencia de carne no significa que careza de sabor. Y lo de los postres si hubiese algo más que galletas de avena, podría ser un súper restaurant. Pero quizá sus fines sean otros y por la decoración y las fotografías, se ve que uno la pasa bien. Este mes iré, tengo que hacerlo, ya no puedo posponerlo y con esta introducción, mejor.

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